Paulo Cannabrava Filho
Lula se ha perdido. Perdió la oportunidad de dar la palabra de orden para los trabajadores, movilizarlos para las grandes causas, como la defensa de la soberanía, vilipendiada desde el golpe contra Dilma en 2016.
Perdió la oportunidad de hablar a los millones de trabajadores por cuenta propia y desempleados que necesitan de la protección del Estado. Podría ter ajustado a reglamentación de las leyes laborales para esa categoría hoy día mayoritaria entre los trabajadores.
Nada menos que embarazoso fue ver aquel inmenso espacio con unos pocos asistentes. Lula se molestó diciendo que fue mal planificada. En verdad fue. Organizado por las centrales que han tercerizado dejando la organización para una empresa de Rio de Janeiro. ¿Qué pensaran? ¿Que la simples presencia de Lula y algunos cantantes sería suficiente para movilizar a las masas?
¡Qué vergüenza! Si comparamos con los actos convocados por los bolsonaristas y los neopentecostales en São Paulo y Rio de Janeiro. Se esperaba un gran acto público movilizador. Lula debería hacer un discurso de estadista, como lo sabe. Hizo un discurso de sindicalista derrotado. Por Dios ¿dónde están los comunicadores del gobierno?
Hay que considerar que la presencia del presidente de la República en un acto lo transforma em acto oficial. Fracaso de todo el aparato de inteligencia y comunicación del gobierno. Todas las instituciones relacionadas con el gobierno deberían ter sido movilizadas para hacer del acto de gobierno un gran acto.
Eso deja en evidencia que el gobierno está perdiendo la guerra de las narrativas, la guerra comunicacional y psicosocial. Prueba que hay buscar gente más competente para componer el núcleo duro de la Presidencia y gerenciar la comunicación y la Inteligencia. Esta también falló al no alertar el presidente sobre la plaza vacía.
Bolsonaro y los neopentecostales siguen dado lección de organización y movilización. Bolsonaro es un criminal, debería estar aislado en una cárcel de máxima seguridad. Está lejos de eso, cierto de la impunidad, sigue en campaña. No puede ser candidato, pero sigue haciendo campaña.
Que nadie quiera admitir que los que repletan la avenida Paulista o las arenas de Copacabana no sea gente del pueblo. Por el contrario, es pueblo irredento y marginalizado, que encontró la salvación en la iglesia y los Evangelios. A ese pueblo hay que decir la verdad que es la gran mentira en la interpretación de la Bíblia; la verdad de que a lucha de todos es la lucha por la Liberación Nacional.
No es introduciendo Dios y Biblia en los discursos que va a corregir la comunicación con el pueblo evangélico. Hay que tener una estrategia de comunicación, pensada globalmente, y utilizar todo el aparato de comunicación que el gobierno tiene a su disposición. Es impresionante la máquina de comunicación del Estado. En cada Ministerio hay un departamento de comunicación, con mucha gente empleada y muy bien equipados. No basta actuar individualmente prestando información a la media.
El aparato de comunicación es tan grande cuanto ineficiente.
Lula en cierto momento ha pedido votos al candidato Boulos infringiendo la Ley Electoral. Es grave porque si la más alta autoridad puede, los partidos van a creer que también tienen el derecho de infringir la Ley. El Tribunal Superior Electoral, atento al cumplimiento debería punir Lula por la desobediencia, metiéndole una multa, para no servir de ejemplo de impunidad.
Podería, teniendo Boulos a su lado, hablar del trabajo que el diputado más votado está haciendo junto a los sin teto, hablar que juntos van a enfrentar el déficit habitacional. Bastaba enaltecer la figura del líder, no precisaba pedir votos.
“La izquierda perdió las calles y eso debería sonar como un alerta máximo para las hostes del Lulismo”, advierte la Folha de São Paulo en editorial titulado “Lula y los fósiles del sindicalismo” y prosigue diciendo que “o las fuerzas político en torno del PT se actualizan, inclusive en los temas relacionados al trabajo, o correrán más riesgos de ser derrotados en las próximas elecciones”.
Estamos próximos da elecciones de octubre en los más de 5,5 mil municipios, 41 de esos con más de 500 mil habitantes, sumando 58,8 millones de votantes, São Paulo tiene 645 municipios y Minas Gerais 853, el mayor número en el país.
El municipio es la célula mater de la ciudadanía. Es allí que acontece todo, desde el buraco en la calle, hasta las manifestaciones culturales de nuestro pueblo. La elección de concejales y alcaldes tiene que ser encarada estratégicamente. Campaña electoral es sobre todo un medio de comunicación en que se utiliza todas las medias y más, cuerpo a cuerpo con los votantes.
Con relación al apoyo a Boulos, es parte de un acuerdo firmado dos años antes. Bastaba explicitar los términos del acuerdo que garantiza e, apoyo del PT (Partido de los Trabajadores) a su candidatura.
Y hay que ver lo siguiente. Lula gobierna con una coalición de más de una decena de partidos. En ese enredo, cada partido debería ser advertido y movilizado para llevar personas al acto de 1º de mayo; la presencia del Presidente transforma cualquier acto em acto oficial de Gobierno.
Ha faltado comando, ha faltado visión estratégica, ha faltado el discurso inflamado con las consignas cruciales para el momento, como es la cuestión de la soberanía nacional, los fenómenos climáticos consecuentes al calentamiento global que están matando nuestra gente, la cuestión indígena… la pauta es grande y no podría dejar a un lado los Brics.
Tenía que haber hecho un discurso de estadista, no de un líder sindical derrotado. Lula sabe cómo hablar como estadista. Es eso, ha faltado comando, ha faltado competencia de su entourage.
La propaganda electoral es permitida solamente a partir del día 15 de agosto del año que se realiza la elección. La ley tiene que ser igual para todos, principio basilar de la democracia. El período de convenciones y registros de candidaturas se inicia en julio.
El tiempo es corto. No se puede perder tiempo con firulas, Hay que decir la verdad al pueblo, la verdad de la acción golpista de Estados Unidos, la verdad de la reconquista de la soberanía nacional, y que la lucha por la liberación nacional es continua.
Paulo Cannabrava Filho, es periodista y director de la revista virtual Diálogos do Sul Global
