¿QUIÉNES SOMOS LOS ADULTOS MAYORES


En época de pandemía

por BRISA MARINA HURTADO DE MENDOZA


El 2018, marca la política maltusiana, del Fondo Monetario Internacional (FMI) “los ancianos viven mucho hay que hacer algo” que en presencia de la pandemia, extiende el brazo repulsivo del FMI a todos los países, relegándonos desde hace años a un segundo lugar para la atención de nuestra salud, o prestándonos un cuidado con paliativos, aspecto que hoy, al colapsar los hospitales se hace evidente.

En el Perú somos 3 millones ochocientos mil, PERSONAS, que hemos pasado la barrera de los 60, cuya crónica de vida merece respeto, somos producto de un proceso histórico y social, somos quienes construimos el presente, tenemos un lugar en la sociedad, un pasado digno y un futuro que siendo nuestro no vamos a dejar que nos arrebaten.

Pero también somos producto de las políticas públicas emanadas de la Constitución del 93 y consecuentemente del modelo neoliberal, somos parte de los trabajadores despedidos y cesados por el Gobierno de Fujimori:

• Somos los pensionistas de las AFP, los que recibimos 300 soles de pensión, o aquellos de la ONP, o de la Caja del Pescador y otros, que tenemos que litigar 10 o 20 años, hasta morir para que nos paguen las pensiones.

• Somos parte de los trabajadores de las cooperativas azucareras a los que las medidas dadas por Alan García, nos despojaron de las acciones en la cooperativa, así nace Gloria, Oviedo y otros

• Somos parte de la población que tuvimos que dejar el campo, por la contaminación de las minas, por falta de agua para riego, por la flexibilización laboral, o por ínfimos precios para nuestros productos.

• Somos todos, profesionales, campesinos, obreros que estos 40 años hemos soportado el efecto de las políticas públicas de los gobiernos de Fujimori, García, Toledo, Humala, que sin un atisbo honestidad nos despojaron de todo, en favor de la empresa privada.

Hoy, que la pandemia se ha extendido y nos quieren asignar el rol de mercadería desechable, debemos erguirnos con la vitalidad de antaño. Hoy que como hace décadas los poderes del Estado, los gremios médicos en clara disputa, no arriban a dar solución alguna, al desastre que se construyó durante dos siglos.

Nosotros debemos enarbolar las banderas de un cambio de estructuras que nos lleve a un modelo de vida solidaria, humano y nuestra.

Cumplimos más de 60 años, nuestra calidad humana no está en cuestión, seguimos de pie, con dignidad, con valor, con sentimiento solidario, para seguir luchando por el futuro, el nuestro, y de las generaciones venideras.