CRÓNICAS DE MIS MEMORIAS.
CHABUCA GRANDA Y LA FLOR DE LA CANELA.
Por Froilán González García.
A la popular compositora y cantante peruana Chabuca Granda la conocí en México en los años 70, autora de las canciones “Fina Estampa” y “La Flor de la Canela”, de fama internacional y de quien el cubano Ignacio Villa, más conocido como Bola de Nieve realizó la mejor interpretación de acuerdo a la propia autora.
Su nombre es María Isabel Granda y Larco, escribió poemas, guiones teatrales y cinematográficos. Nació en 1920 en Apurimac, donde su padre, administrador de una mina, dejó huellas en su formación de niña sensible contra la explotación, su familia se trasladó a Lima donde estudió en prestigiosas instituciones. En la década de 1960, con el triunfo de la Revolución Cubana se inspiró en los cambios sociales, expresaba su admiración por Fidel Castro y la juventud que luchaba junto al Comandante en Jefe por un mundo de justicia y sin discriminación.
Estableció amistad con varios revolucionarios peruanos, entre ellos el poeta Javier Heraud, asesinado durante las guerrillas de 1963 y a quien le compuso varios poema y canciones: “Las flores buenas de Javier” “El fusil del poeta es una rosa”, “Silencio para ser cantado”, o “Una canoa en Puerto Maldonado”, lugar donde fue asesinado. También compuso canciones dedicadas a jóvenes revolucionarios, como “No lloraba… sonreía” y “Si fuera cierto” donde recuerda a la cantante chilena Violeta Parra.
Se vinculó a la asociación cultural musical “Perú Negro”, con quienes en 1969 ganó el Gran Premio en el Festival Hispanoamericano de la Danza y la Canción celebrado en Buenos Aires, dos años después participó en México en el Festival Internacional de la Danza y comenzó una gira por América Latina para participar en conciertos, festivales y espectáculos. Se convirtió en defensora y divulgadora de la cultura afroperuana. En ocasión de la Guerra de las Malvinas compuso la canción “Argentina agredida” llamando a la solidaridad con el pueblo que tanto amaba.
Fue amiga de Juan Pablo Chang-Navarro Lévano (chino), combatiente en la guerrilla boliviana, asesinado en La Higuera el 9 de octubre de 1967 junto al Comandante Ernesto Che Guevara.
“La Flor de la Canela” era una de las canciones preferidas de Juan Pablo por considerarla de identidad nacional y junto a los demás guerrilleros la cantaban en la selva boliviana.
En México contó que el General Juan Velasco Alvarado, Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, que el 3 de octubre de 1968 comenzó un proceso revolucionario, la invitó para actuar en una ceremonia oficial, pero puso como condición cantarle a sus amigos guerrilleros y el General le expresó que podía hacerlo.
Tenía muchos críticos dentro de la alta sociedad racista de Lima, le reprochaban su amistad con Victoria Angulo, afrodescendiente que le inspiró para la canción “La Flor de la Canela”, quien la visitaba en una instalación donde Chabuca hacía demostraciones de productos de belleza. La señora Angulo vivía en el Rímac y para llegar a su casa debía de cruzar el antiguo puente de madera rumbo a la Alameda. También la criticaban por el apoyo a jóvenes poetas o cantantes negros, sus visitas a los mercados de artesanía indias, donde tenía varias amistades y su apoyo al proceso revolucionario de Velasco Alvarado.
Compuso más de cien canciones, basadas en el folclore y en la historia de su país. Un fin de año nos regaló una colección de discos con sus canciones y poemas y una llama de tamaño natural con piel y lana de ese bello animal andino.
En Lima visitaba con frecuencia a sus padres en el Distrito Barranco, uno de los 43 de la capital peruana, convertido en balneario para veraneantes de las clases media y alta, quienes construyeron grandes mansiones y el famoso Puente de Los Suspiros en 1876 para unir los extremos de la profunda quebrada. En ese Distrito viven reconocidos intelectuales y artistas y fue designada hija adoptiva y una famosa alameda lleva su nombre.
Durante la guerra con Chile, el Distrito fue saqueado e incendiado por las tropas de ese país y en 1940 un terremoto de 8 grados en la escala de Richter destruyó gran parte de su zona residencial.
Actualmente es muy concurrido por los numerosos restaurantes, bares bohemios, discotecas y peñas criollas.
Nuestros hijos Leandro y Liván propusieron incluir la canción “La Flor de la Canela” en el documental dedicado a Juan Pablo en la serie televisiva “Semillas del Ñacahausú” y en Lima conocimos que el pianista Hernán Vega, admirador de Cuba, de nuestro poeta nacional Nicolás Guillén y propietario del famoso restaurante “Songorocosongo” ubicado en la mansión familiar del Distrito Barranco, era uno de los mejores intérpretes al piano de la mencionada canción y que su hijo orgullosamente llevaba el nombre en honor al Comandante Camilo Cienfuegos, por esas razones coordinamos para visitarlo y filmarle para el documental.
El día acordado llegamos acompañado del embajador cubano Sergio González, de su esposa la consejera cultural Marlene García, el consejero político Eddy Padrón y nuestro hijo Liván González Cupull. Nos recibieron muy amablemente con una copa de Pisco Souer y Ceviche, servido en conchas marinas.
Lamentablemente ese día en horas de la mañana se realizó el entierro de la mamá de Hernán, le propusimos posponer la filmación, pero no aceptó, de modo que decidimos incluir a su progenitora en el homenaje y con la canción de “La Flor de la canela” interpretada al piano por Hernán, finalizar el documental sobre Juan Pablo Chang.
En La Habana en marzo del 2017 la Embajada del Perú, el Teatro Lirico Nacional de Cuba y de la Oficina del Historiador de la ciudad de La Habana, le ofrecieron un homenaje a Chabuca Granda y recibimos una invitación especial que dice: “Un homenaje a la reconocida cantante peruana Chabuca Granda a realizarse el jueves 30 de marzo a las 18 horas en la Basílica y Convento de San Francisco de Asís.”
Ese año en Perú su obra musical fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación y en 2019 el gobierno le concedió a título póstumo la Orden “El Sol del Perú”, considerada la máxima condecoración que otorga ese país. …