ISRAEL. FEROCIDAD GENOCIDA

Editorial de La Jornada, sábado, 4 de mayo de 2023

Como resultado de la masacre intencional de la población civil han 

muerto más de 10 mil palestinos, con un porcentaje aterrador de 

mujeres y menores de edad: de acuerdo con la organización Save the 

Children, en tres semanas Israel asesinó a 3 mil 542 niños, más de los 

que han muerto en todos los conflictos en el mundo desde 2019. Otros 

mil permanecen desaparecidos, y el conteo sube cada hora. El director 

de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, resumió el sentir de todo ser 

humano dotado de sensibilidad y empatía al afirmar que no tiene 

palabras para describir el horror que se está desarrollando en Gaza.

Además de médicos, personas hospitalizadas, mujeres y niños, Tel Aviv 

ha convertido a los periodistas en un blanco prioritario de su 

operación genocida. El último día de octubre, el Comité para la 

Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) denunció que 

desde el día 7 de ese mes habían muerto 31 informadores, de los cuales 

26 eran palestinos, cuatro israelíes y uno libanés. Otros ocho fueron 

heridos y nueve permanecían desaparecidos, con lo que el 

enfrentamiento en curso alcanzó el macabro récord de ser el más letal 

para los comunicadores de cuantos han estallado entre los ocupantes 

israelíes y la resistencia palestina. El jueves por la noche, los 

bombardeos asesinaron a Moha-mmed Abu Hatab, un veterano corresponsal 

de la televisión palestina. Diez miembros de su familia murieron en la 

misma masacre, la cual generó una conmoción especial en medio de todo 

el sufrimiento que padecen minuto a minuto los gazatíes. El régimen de 

Benjamin Netanyahu impide el acceso a Gaza de todo periodista 

extranjero, por lo que toda la información que sale de la zona 

asediada corre a cargo de informadores palestinos, y exterminarlos 

parece parte de la estrategia de negación del genocidio que lleva a 

cabo el gobierno ultraderechista.

La violación constante de los derechos humanos e incluso de las reglas 

que rigen la guerra bajo el derecho internacional humanitario ha 

despertado el repudio de individuos, organizaciones y gobiernos de 

todo el mundo, en particular entre las comunidades árabe y musulmana. 

Algunos países de mayoría islámica que en años recientes habían 

emprendido un acercamiento con Israel han considerado que los sucesos 

actuales resultan inadmisibles, y han roto relaciones diplomáticas con 

Tel Aviv. Actores que ya mantenían relaciones más que tensas con el 

Estado israelí, como Irán y la milicia libanesa Hezbolá, han 

manifestado su disposición a intervenir en defensa del pueblo 

palestino si no cesan los ataques indiscriminados contra inocentes, 

por lo que el riesgo de extensión del conflicto es más elevado que nunca.

La sociedad mexicana no permanece indiferente ante la aflicción de 

Palestina, y organizaciones solidarias con la causa de la justicia y 

la paz en Medio Oriente convocaron a una marcha en contra del 

genocidio, la cual tendrá lugar mañana por la tarde en la Ciudad de 

México. Cabe saludar que los ciudadanos se expresen con firmeza ante 

la guerra de aniquilamiento declarada por Netanyahu, así como esperar 

que todos los actos de protesta transcurran de forma pacífica para no 

alimentar la maquinaria propagandística usada por los poderosos para 

victimizarse cuando sus tropelías son exhibidas.