Por Yunior Bolaños R.
La Humanidad está siendo puesta a prueba una vez más pero las personas sabrán sobreponerse y salir adelante como lo han demostrado en el transcurso de la historia; y es ahí donde entra a jugar un papel fundamental la solidaridad, el altruismo y la entrega por el otro, ese que está a nuestro lado, que comparte nuestros ideales de lucha y el sentimiento puro y verdadero por una comunidad de los Hombres y Mujeres de buena voluntad.
Y en honor al momento histórico que nos ha tocado vivir, debemos hacer nuestras estas palabras de Fidel Castro Ruz y tener presente su pensamiento; ya que, la humanidad tiene necesidad de soluciones. La humanidad crece, la humanidad se multiplica; y a la par va creciendo la necesidad de justicia y equidad social; sin embargo, el Imperio, de la mano de la actual administración norteamericana se aboga el derecho de destruir y ahogar todos los procesos progresistas de esta América Nuestra.
El hombre tendrá y tiene que hacer todo lo necesario para llevar puerta por puerta y de corazón en corazón todo el legado vivo del Padre Varela, de Martí, de Fidel, de Chávez, de Allende, de Mariátegui y de Bolívar; porque es desde la base que podemos ir sembrando el amor por la historia de nuestras patrias, poniendo el máximo de nuestra fe en la persona de éste Nuevo Hombre que está despertando en la América del Sur del Rio Bravo a la Patagonia, aprovechando su valentía, aprovechando sus sentimientos éticos y morales en pos de una fraternidad humana en lo relacional, lo prosocial y la sociabilidad que los identifique como revolucionarios; para cosechar los frutos de la inteligencia y de la voluntad del hombre.
Concibiendo un mundo en el cual la humanidad no se someta a los intereses del imperialismo, del capitalismo, del fascismo, del neocolonialismo, del racismo, ni a la brutal explotación del hombre por el hombre en todas sus formas y manifestaciones, y no caer así en el ocaso de la historia de la humanidad, y sus enloquecidos servidores lo saben; por eso sus reacciones son cada vez más desesperadas, más histéricas, más cínicas, más impotentes.
Pues, para ellos, a los pueblos del Tercer Mundo, nos corresponde lo peor: podemos ser barridos de la faz de la Tierra en una guerra de la cual no tengamos la menor responsabilidad y en la cual no tomemos parte alguna; podemos ser aplastados por el hambre y la miseria en virtud de un orden económico mundial que no fue creado por nosotros, y que surgió y se desarrolló a pesar de nosotros y contra nosotros.
Por eso, hemos de estar convencidos de que el socialismo puede salvar a la humanidad de los peligros espantosos que la amenazan. Por eso, hemos de seguir en pie de lucha con la guía paradigmática de que:
“…si queremos expresar cómo aspiramos que sean nuestros combatientes revolucionarios, nuestros militantes, nuestros hombres, debemos decir sin vacilación de ninguna índole: ¡Que sean como el Che! Si queremos expresar cómo queremos que sean los hombres de las futuras generaciones, debemos decir: ¡Que sean como el Che! Si queremos decir cómo deseamos que se eduquen nuestros niños, debemos decir sin vacilación: ¡Queremos que se eduquen en el espíritu del Che! Si queremos un modelo de hombre, un modelo de hombre que no pertenece a este tiempo, un modelo de hombre que pertenece al futuro, ¡de corazón digo que ese modelo sin una sola mancha en su conducta, sin una sola mancha en su actitud, sin una sola mancha en su actuación, ese modelo es el Che! Si queremos expresar cómo deseamos que sean nuestros hijos, debemos decir con todo el corazón de vehementes revolucionarios: ¡Queremos que sean como el Che!…”
Y la sabia palabra expresada por Fidel cuando manifestó:
“…Revolución es sentido del momento histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado; es igualdad y libertad plenas; es ser tratado y tratar a los demás como seres humanos; es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos; es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional; es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio; es modestia, desinterés, altruismo, solidaridad y heroísmo; es luchar con audacia, inteligencia y realismo; es no mentir jamás ni violar principios éticos; es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de la verdad y las ideas. Revolución es unidad, es independencia, es luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo, que es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y nuestro internacionalismo…”
Para legarnos que:
“…libertad quiere decir algo más todavía: libertad quiere decir patria. Y la disyuntiva nuestra sería Patria o Muerte. ¡Patria o muerte!…”
La Victoria es Nuestra.
Yunior Bolaños Rodríguez
Especialista en solidaridad…
