COLOMBIA. GUAIDÓ EN ASCUAS POR SU VÍNCULO CON NARCOS

La prensa de la oligarquía colombiana intenta desesperadamente lavarles la cara a Duque y a Guaidó

Los medios de comunicación controlados por la oligarquía y la élite política colombiana tratan de evitar mayores daños a la imagen de Juan Guaidó y del gobierno de Iván Duque, salpicado
profusamente por el escándalo de las fotos del autoproclamado con cabecillas del sanguinario
grupo narcoparamilitar los Rastrojos.

El diario El Tiempo sacó a relucir su pomposa Unidad Investigativa con el único propósito de
desmentir lo que han denunciado factores colombianos: que Guaidó llegó a Cúcuta en febrero
pasado mediante una operación conjunta de los Rastrojos y el gobierno de Duque, un hecho muy grave, tanto para el pretendido presidente encargado de Venezuela como para el mandatario neogranadino

Desde la primera línea, el reportaje de El Tiempo pretende demostrar que todo lo que se ha dicho hasta ahora es falso. El título dice: “La verdadera historia detrás de las fotos de Guaidó con dos
Rastrojos”.

La nota de El Tiempo está enfocada en salvar la responsabilidad tanto de Guaidó como de Duque, aunque el énfasis mayor es para el jefe de Estado colombiano.Este es el párrafo completo: El
trabajo se afana en demostrar que los narcoparamilitares no tuvieron a su cargo el traslado de
Guaidó de uno a otro territorio.

En tal sentido afirma el texto que Albeiro Lobo Quintero, alias ‘el Brother’ (al que califican muy
cuidadosamente como “señalado jefe financiero de la banda”) y su lugarteniente, John Jairo
Durán Contreras, alias ‘el Menor’, “le salieron al paso a la comitiva de Guaidó cuando se
desplazaba por una trocha venezolana hacia Colombia”.

De esa manera señalan que las fotos fueron tomadas cuando aún estaban del lado venezolano,
pero no explican con base en qué elementos hacen esa afirmación.

El trabajo se afana en demostrar que los narcoparamilitares no tuvieron a su cargo el traslado de
Guaidó de uno a otro territorio.

En tal sentido afirma el texto que Albeiro Lobo Quintero, alias ‘el Brother’ (al que califican muy
cuidadosamente como “señalado jefe financiero de la banda”) y su lugarteniente, John Jairo
Durán Contreras, alias ‘el Menor’, “le salieron al paso a las versiones que circularon cuando
salieron a la luz las fotos indican que los jefes de los Rastrojos impusieron un toque de queda  de
un día completo a las poblaciones ubicadas en el lugar estipulado para el cruce de Guaidó,
concretamente Guaramito y Agua Clara, para realizar el traslado con el menor número posible de
testigos.

Según el diario colombiano, el gobierno de Duque esperó a Guaidó en la zona de Guaramito dado que solo podía hacerse cargo de su seguridad una vez que traspasase la frontera.Para demostrar
dónde comenzó la custodia oficial, El Tiempo mostró fotos del callejón de honor que se improvisó en la zona para recibir a Guaidó con honores de jefe de Estado.

No queda claro cómo ese recibimiento desmiente lo ocurrido previamente, el rol protagónico que tuvieron los Rastrojos en esa fase del traslado y la necesaria coordinación con las autoridades.

La foto de los soldados con uniformes de gala formados alrededor de una alfombra roja colocada
sobre una cancha de fútbol casi carente de grama fue acompañada con la declaración oficial de la Cancillería colombiana en  la que se asegura que “el Gobierno no participó en la logística del
traslado del presidente Guaidó desde Caracas hasta la frontera con Colombia, ni tuvo ningún rol
en su paso por los sitios conocidos como trochas, usados por él y su equipo”.

Escándalo vivo, testigos muertos

El ex presidente colombiano Ernesto Samper dijo en su cuenta Twitter que el problema no es que
Guaidó se haya fotografiado con los paracos, “sino por qué los conoció, quién se los presentó, para qué, en qué y por qué lo ayudaron a entrar clandestinamente al país”.

Mientras tanto, el autor de la acusación original (el primero que publicó las fotos) Wilfredo
Cañizares, un defensor de derechos humanos que ha denunciado las barbaridades cometidas por los Rastrojos, advirtió que parece estar en marcha un proceso de eliminación de los testigos del
ingreso de Guaidó a Colombia con el apoyo logístico de la banda paramilitar.

Para probar esta grave denuncia  informó que en la noche del domingo y la madrugada del lunes,
Iván Hernando Posso, alias “Nandito”, estuvo a punto de ser asesinado. Logró huir, pero en
represalia, los sicarios mataron  a sus padres y otros dos familiares.

“Nandito” también se fotografió con Guaidó, aunque la gráfica no ha sido tan viral como la que el diputado venezolano se tomó con los otros dos delincuentes: “el Brother” y John Jairo Durán y “el Menor”.“Nandito” estaba identificado como la mano derecha de “el Menor”, y se le consideraba el
jefe de finanzas en el sector Boca de Grita (Táchira) de la banda que opera entre los dos países.

Está solicitado por homicidio, secuestro, extorsión, narcotráfico y asociación para delinquir.

El intento de blanqueo de El Tiempo, que ha sido secundado por numerosos medios digitales en
Colombia y en Venezuela, está lejos de haber aplacado los ánimos en el escenario político
colombiano.

El escándalo sigue vivo.

El senador Antonio Sanguino le envió una pregunta al canciller Carlos Holmes Trujillo: ¿Cómo
supo por dónde llegaría Guaidó para enviar el helicóptero?Para generar una apariencia de
reportaje bien sustentado, la Unidad de Investigación de El Tiempo agregó una serie de detalles
acerca del abultado prontuario de los dos hombres que posaron con Guaidó en las célebres
fotografías.

Los redactores dejaron deslizar el dato (aunque sin indicar su procedencia) de que las fotos
salieron a la luz siete meses después de haber sido tomadas porque las filtró un escolta de Guaidó.El Tiempo también puso su contribución para victimizar al aliado político de la oligarquía
colombiana, al afirmar que el material gráfico “fue usado por el gobierno de Maduro para
desprestigiar a Guaidó y abrirle una investigación”.

(LaIguana.TV)http://www.resumenlatinoamericano.org/2019/09/17/venezuela-la-prensa-de-la-oligarquia-colombiana-intenta-desesperadamente-lavarles-la-cara-a-duque-y-a-guaido/ResponderResponder a todosReenviar