Cámara de Representantes condena tuits racistas de Donald Trump
En este artículo: Cámara de Representantes, Congreso, Donald Trump, Estados Unidos, Racismo17 julio 2019 | 3 | Compartir26
“Si no están contentas en Estados Unidos, si se quejan todo el tiempo, pueden irse”, fue una de las frases que escribió Trump sobre las congresistas. Foto: McLean’s.
La Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, aprobó condenar los recientes comentarios racistas de Donald Trump en contra de cuatro legisladoras, de quienes el presidente norteamericano dijo que deberían regresar a sus países de origen, aun cuando son ciudadanas de Estados Unidos y tres de ellas nacieron en territorio estadounidense.
La cámara baja del Congreso aprobó la resolución de condena con 240 votos a favor y 187 en contra. A pesar de que no conlleva repercusiones legales para el presidente, cuyos comentarios podrían serle útiles entre sus simpatizantes conservadores, analistas consideran que fue una embarazosa reprimenda para Trump.
Pese a un esfuerzo de cabildeo por parte de Trump y de los líderes del partido para presentar un frente unido, cuatro republicanos votaron el martes a favor de condenar sus comentarios: los representantes moderados Brian Fitzpatrick, Fred Upton, Will Hurd y Susan Brooks, quien está por jubilarse. Entre los que apoyaron la resolución estaba el representante independiente Justin Amash, quien salió del Partido Republicano hace unas semanas tras convertirse en el único miembro del partido en el Congreso en apoyar una investigación para destituir a Trump.
Antes de la votación, como es costumbre, Trump arremetió con sus insultos habituales. Acusó a sus cuatro detractoras de “espetar algunas de las cosas más viles, detestables y asquerosas jamás dichas por un político”, y agregó: “Si no están contentas en Estados Unidos, si se quejan todo el tiempo, pueden irse”, palabras similares a los escarnios vociferados desde hace mucho contra los disidentes políticos, aunque no contra legisladores del partido opositor.
Al igual que el mandatario, el líder de la minoría republicana en la cámara baja, Kevin McCarthy, y otros representantes de ese partido, trataron de desviar la atención de los tuits originales de Trump, que durante tres días han consumido a Washington y provocado una condena generalizada.
En lugar de eso, intentaron jugar a la ofensiva al acusar de socialistas a las cuatro congresistas, que han sido críticas de la gestión y las actitudes políticas de Trump, de ser socialistas, un señalamiento que ya es parte fundamental de la campaña del Partido Republicano para 2020.
Incluso, tras dos años y medio de un gobierno turbulento de Trump, la imagen de un presidente que intenta inútilmente impedir una votación de la Cámara Representantes que básicamente lo tachó de racista fue un evento extraordinario.
Enfatizando los riesgos, los republicanos formalmente objetaron después de que la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijera durante un discurso ante el pleno que los tuits del presidente eran “racistas”. Encabezados por el representante Doug Collins, los republicanos pidieron que se eliminaran los comentarios de las actas, una objeción procesal poco común.
Aun así, los demócratas aprovecharon su mayoría y poco después votaron a favor de que la declaración de Pelosi permaneciera en el registro.
Algunos legisladores republicanos han estado de acuerdo en que las palabras de Trump fueron racistas, pero el martes los líderes del partido insistieron en que no lo eran y acusaron a los demócratas de valerse del alboroto para sumar puntos políticos.
Horas antes, Trump tuiteó: “Esos tuits no fueron racistas. ¡No hay un solo hueso racista en mi cuerpo!”. Escribió que los republicanos de la Cámara de Representantes no deberían mostrar “debilidad” al estar de acuerdo en una resolución que describió como una “estafa demócrata”.
La representante Alexandria Ocasio-Cortez, una de las cuatro legisladoras a las que iban dirigidos los comentarios de Trump, respondió al mandatario.
“Tiene razón, señor presidente, no tiene un solo hueso racista en su cuerpo. Tiene una mente racista en la cabeza y un corazón racista en el pecho”, tuiteó.
(Con información de AP)
