PERÚ. ¡TODO CONTRA EL PUEBLO…!

Por Gustavo Espinoza M.

El reciente aquelarre neo fascista celebrado en medio de estrictas medidas de seguridad, y clausurado el jueves en La Molina; fue apenas la punta del Iceberg.  Aun así,   sirvió para anunciar una violenta ofensiva de la ultra derecha que decidió arremeter con todo contra el pueblo peruano usando para el efecto, las más variadas modalidades de ataque.

El Mensaje de la cita pomposamente denominada “Por La Libertad y la Democracia”, pretende hacernos comulgar con ruedas de molino. Busca convencernos que todos los males que agobian a nuestro país tienen un   origen: la izquierda latinoamericana culpable del hambre, la miseria, el atraso, el subdesarrollo, la desnutrición,  el analfabetismo, la desocupación,  la ignorancia, la precariedad, la falta de vivienda, los bajos salarios, la destrucción del aparato productivo del país, y todo lo que deriva del sistema de dominación vigente;  hay que atribuirlo al Foro de Sao Paulo, al Grupo de Puebla, al Proceso Bolivariano, a los Presidentes de Honduras, Bolivia, Colombia, México, Chile y Argentina, al embajador cubano acreditado en Lima y a Pedro Castillo: El Socialismo del Siglo XXI,

Y nos asegura que ellos –VOX, los Franquistas, el PAN de México, los Macristas de Argentina, Bolsonaro, los pinochetistas de Chile,  Uribe y Duque de Colombia, la Janine Añez de Bolivia y otros más –pulquérrimos exponentes de la democracia continental- habrán de salvarnos de las garras del chavismo, variante demoniaca que ha adoptado el comunismo internacional en nuestro tiempo.

Como garantía suprema de sus nobles propósitos, estos valerosos Cruzados de nuestro tiempo, nos informan que sus representantes en el Perú han de ser López Aliaga, Jorge Montoya, la señora Alva, José Williams y algunos más.  Adicionalmente, para que creamos ciegamente en sus edulcoradas promesas, nos informan que, a través de Willax TV, nos hablarán sus más legítimos voceros ¡Mayor generosidad, nadie podría esperar!

Y claro, para demostrar que su competencia no queda en palabras, nos muestran sus acciones: han cerrado el Museo de la Memoria a fin de impedir la presentación del informe anual de Amnistía Internacional;  apaleado a los manifestantes en Miraflores la noche del miércoles pasado;  clausurado INPARES; prohibido el ingreso de representantes de organismos de DDHH al Perú; atacado manifestaciones de protesta en distintas avenidas de la ciudad capital, provocado una nueva crisis diplomática con Colombia; iniciado otro pleito con México por la Presidencia de la Alianza del Pacífico; super blindado a Dina Boluarte, y protegido a los Congresistas para que se mantengan con ella hasta el 2026, con privilegios descomedidos

Hay quienes no les dan importancia a estos hechos porque los consideran “puntuales”. Y dicen ingenuamente que son risibles y que no deben tomarse en serio. A ellos, les recordamos que en el siglo pasado se decía que Mussolini era apenas un altavoz con piernas; que Hitler era tan sólo “el cabo austriaco”; y que los militares que se alzaron el 36 contra La República Española eran apenas “4 generales”. No. Todos ellos llevaron al mundo al borde del colapso. Al fascismo, hay que tomarlo en serio.

No enfrentarlo, pensar que pronto “habrá de pasar”, o creer que es cuestión de “dialogar” simplemente; constituye un error descomunal.  En el pasado, costó la vida de millones, y arrasó pueblos enteros. Dejó en la humanidad, una herida aún abierta.  

Pero si es grave el desinterés que muestran las “capas medias” y los sectores formalmente “democráticos”; es aún más preocupante la falta de criterio que asoma en las consideradas “fuerzas más avanzadas del movimiento popular”.

Hoy, hay quienes están pensando en sus tareas orgánicas de tipo partidista; o en la creación de un membrete electoral para postular listas parlamentarias en comicios a futuro. Unos y otros, no tienen visión estratégica del proceso social, no se dan cuenta de lo que ocurre o creen que el peligro se habrá de esfumar por sí solo. Craso error, sin duda.

 El pasado 8 de marzo la generala Laura Richardson, Jefe Supremo del Comando Sur de los Estados Unidos presentó un Informe del Pentágono ante el Congreso de esa Nación. Dijo allí cosas muy graves que deben ser tomadas en serio.

Admitió que, en el escenario de nuestro tiempo, los “enemigos” de la Democracia Occidental, eran China y Rusia; que  los Estados Unidos, ante ellos, debía “tomar la iniciativa”  y mostrar una “actitud beligerante” y que en las condiciones de hoy, le seguridad de su país estará relacionada con la región.

 Así lo reconoció por primera vez de modo explícito, y propuso por eso, militarizar la política norteamericana hacia los países al sur. Textualmente afirmó: “La defensa de la Patria Estadounidense está directamente vinculada a la resiliencia, estabilidad y seguridad de la región de América Latina y el Caribe”

Con evidente preocupación señaló que el comercio de China con  esta región, pasó de 18.000 millones de dólares en 2002 a 450.000 millones 20 años después, con una proyección posible de 700.000 millones para el 2035. Según Washington, Beijing “invierte en infraestructura, puertos de aguas profundas, instalaciones cibernéticas y espaciales que pueden tener un doble uso, para actividades comerciales y actividades militares malignas”.

La iniciativa china de la Franja y la Ruta (o Ruta de la Seda), acordada ya con 21 países latinoamericanos incluye desde trenes balas que unen la costa atlántica con la pacífica hasta la construcción o modernización de aeropuertos y carreteras. Por otra parte. Rusia mantiene vínculos económicos y militares con casi todos los países de la región: en tanto que más de un millón,  se informan a través de RT y Sputnik.

Y la Generala fue más allá, aseguró que la confrontación que se vendría –con China y Rusia- no era geográfica, territorial o económica, sino ideológica. De ese modo, se remitió a la pugna por el dominio mundial entre el capitalismo y el socialismo. Si los militares norteamericanos lo ven así, es bueno que lo digan, y que lo sepa el mundo. (fin)