PRONUNCIAMIENTO DEL CEDIS

CENTRO DE ESTUDIOS “DEMOCRACIA, INDEPENDENCIA Y SOBERANÍA”

     CEDIS

¡EL PUEBLO PERUANO ES IMBATIBLE!

Luego de doce jornadas de lucha libradas a lo largo y ancho del país, bien podemos asegurar que el pueblo peruano, es imbatible.  Afronta el combate contra la dictadura impuesta desde el 7 de diciembre pasado, con valentía ejemplar, y ha dejado ya una estela de sangre regada en los caminos de la patria.  Ella caerá inevitablemente sobre los responsables de este genocidio que ha desatado el mayor repudio popular en lo que va del presente siglo.

LA RERESIÓN ES CRIMINAL

Cuando se haga un balance del proceso social peruano, habrá de llegarse a la conclusión que ésta  es la represión más salvaje y criminal que ha conocido el país por cuenta de un gobierno formalmente “democrático” pero que busca imponer a sangre y fuego la perpetuación de un “modelo” Neo liberal, absolutamente en contra de la voluntad ciudadana.

Desde el inicio de su gestión, quienes tienen hoy en sus manos las riendas del Poder, han impuesto un régimen ilegal basado en el Estado de Emergencia e incluso en el Toque de Queda, con el propósito de masacrar a los peruanos luego de intentar doblegarlos por la fuerza. Objetivamente, quienes así han actuado, han fracasado en toda la línea, y su derrota ya se avizora.

Más de medio centenar de compatriotas han caído ya en estas jornadas de lucha   y pasa el millar el número de personas que han sido heridas, perseguidas o encarceladas, tan sólo por poner resistencia a los planes agresivos de la reacción.

Cada uno de los combatientes que han caído, ha pasado ya a la más alta distinción de héroes, que les ha otorgado el pueblo mismo en cada una de las ciudades que resultaran escenario de su muerte.

Los crímenes, sin embargo, no habrán de quedar sin castigo. No vivimos ya en los tiempos del medioevo, en los que se podía matar sin rendir cuenta a nadie. Hoy existen disposiciones legales que castigan las violaciones a los   derechos humanos por encima de las fronteras de los países, y que reconoce la imprescriptibilidad de los delitos de este orden. Más temprano que tarde, Dina Boluarte, Alberto Otarola y todo el séquito que apuntala este horror, habrá de responder ante la justicia de los hombres.

Y es  que el asesinato de personas de manera masiva y constante, no es ciertamente una estrategia política, sino simplemente una perversión moral que se deriva de la descomposición que abate a la sociedad capitalista y expoliadora impuesta en nuestra patria.

LA FARSA Y EL ENGAÑO 

Lo que está claro es que el gobierno busca imponerse a través de la farsa y el engaño. Incapaz de responder por sus crímenes levanta mentiras por doquier. Acusó primero, al Presidente de México y hasta se permitió expulsar del país al embajador de ese país. Ahora, busca responsabilizar a Evo Morales, como si el ex presidente boliviano hubiese tenido a su cargo el alzamiento de todas las poblaciones. En esa línea, señala también al presidente de Colombia, Gustavo Petro, e incluso al embajador cubano en el Perú, Licenciado Carlos Rafael Zamora. Contra nadie podría probar absolutamente nada, pero persiste en lo que constituye una cantaleta orientada a servir los objetivos de Washington, empeñado en quebrar al Proceso Emancipador Latinoamericano que toma fuerza en nuestro continente.

Para sustentar los artificios que manejan tras este propósito, los nuevos gobernantes peruanos fabulan pretendiendo hacer creer al mundo que las balas dum-dum usadas para matar en Juliaca, fueron bolivianas y responden a un “envío” hecho por  el ex mandatario del altiplano para  “subvertir el orden” en el Perú. A través de esa versión buscan atribuir a “influencia extranjera”  la protesta peruana, pero también liberar de responsabilidad a la policía nacional autora material de esos abominables crímenes consumados recientemente.     

Es claro, sin embargo, que esta orientación, y estas mentiras, forman parte del arsenal del Imperio, empeñado en detener el avance de los pueblos que dan pasos seguros en la tarea de liberar a los países del dominio yanqui. La estrategia norteamericana es la respuesta a la voluntad de los pueblos de América que en sucesivos comicios electorales celebrados en los últimos años, han derrotado a las fuerzas más conservadoras y reaccionarias.

Más recientemente el gobierno ha usado a grupos fascistas que imponen la violencia civil en la calle. Así, han atacado en el Cusco y en Madre de Dios a manifestantes Y lo han hecho en Lima agrediendo el local del Ágora Popular y tos Fonavistas más recientemente. Tras estas acciones se dan  la mano los grupos fujimoristas liderados por “La resistencia”, los Comando de Acción del APRA y delincuentes venezolanos puestos a su servicio

LA VICTORIA SERÁ DEL PUEBLO

No obstante todo ello, la victoria será del pueblo.  Sólo que esta vez, dará paso a un escenario cualitativamente distinto. El 2020 el pueblo que luchó heroicamente, debió  admitir una “transición” conciliadora y oportunista que buscó siempre un “acuerdo”  con la reacción. Hoy, con más experiencia y mejor organizado, el pueblo sabrá imponer condiciones para alcanzar su propia liberación

Para todos los peruanos, la lucha está planteada; y en ella, no hay posibilidad de retroceso.

Lima, 17  de enero del 2023

Centro de Estudios “Democracia Independencia y Soberanía” (CEDIS)