BOLETIN 2 DE JULIO 2022
SALUDO DEL PRESIDENTE DE RUSIA, VLADÍMIR PUTIN, A LOS PARTICIPANTES DEL FORO JURÍDICO INTERNACIONAL DE SAN PETERSBURGO
Se está formando activamente un sistema multipolar de relaciones internacionales. Este proceso es irreversible, está pasando ante nuestros ojos y es objetivo. Y la posición de Rusia y muchos otros países es que tal orden mundial democrático y más justo debe construirse sobre la base del respeto y la confianza mutuos y, por supuesto, los principios generalmente reconocidos del derecho internacional y la Carta de la ONU.
Al mismo tiempo, hoy se dice que el derecho ya no puede responder apropiadamente a los problemas y desafíos de nuestro tiempo, a los cambios rápidos y fundamentales.
Por supuesto, el sistema del derecho internacional requiere desarrollarse, pero no confundan la causa y el efecto. Las crisis no nacen por los vicios supuestamente inherentes al derecho.
El punto es diferente: en los intentos de reemplazar la ley con el dictado y las normas internacionales con la jurisdicción nacional de estados individuales o grupos de estados, en una negativa deliberada a seguir principios legales inalienables: justicia, buena fe, igualdad y humanismo.
No se trata sólo de fórmulas jurídicas, sino precisamente de aquellos valores que reflejan toda la diversidad de nuestra civilización. Algunos estados no están dispuestos a pérder el dominio en el escenario mundial, buscan mantener un modelo unipolar injusto.
Bajo la apariencia del llamado orden basado en reglas y otros conceptos dudosos, están tratando de controlar y dirigir los procesos globales a su propia discreción, creando bloques cerrados y coaliciones que toman decisiones beneficiosas solo para un país – los Estados Unidos de América.
Se ignoran los derechos naturales de otros participantes de las relaciones internacionales y se interpreta selectivamente el principio fundamental de la indivisibilidad de la seguridad.
Las sanciones ilegítimas unilaterales impuestas por Occidente a los estados soberanos han alcanzado proporciones sin precedentes.
Aquellos países que predican su exclusividad, y en su política interna pasan por encima de la ley, tachan conceptos como la inviolabilidad de la propiedad, la libertad de expresión.
En una palabra, el dominio de un país o grupo de países en el escenario mundial no solo es improductivo, sino también peligroso e inevitablemente genera riesgos sistémicos a gran escala. En el mundo multipolar del siglo XXI, no debe haber lugar para la desigualdad, la discriminación entre estados y pueblos.
Por ello, nuestro país apuesta por la implementación en la práctica del principio jurídico internacional fundamental de la igualdad soberana de los estados y el derecho de cada uno a su propio modelo de desarrollo.
EL CANCILLER DE RUSIA SERGEI LAVROV SOBRE LA POLÍTICA DE LA OTAN
Está claro para todo el mundo, que la OTAN no se avergüenza de decirlo y lo volvió a decir en la cumbre de la OTAN en Madrid: cuentan con la obediencia incondicional de todos los demás Estados a su voluntad, que refleja sus intereses egoístas, principalmente los de Estados Unidos.
Porque, la Europa moderna, representada por la Unión Europea, está perdiendo su independencia o los signos de independencia que tenía, y está completamente sometida a las posiciones que impone Washington.
Miren la lista actual de sanciones y comparen las restricciones impuestas por los países europeos contra Rusia con las que introdujo EEUU. Washington trata de no actuar en áreas en las que puede causar graves daños a su propia economía.
Sí, EEUU siente los efectos negativos de sus propias sanciones, pero Europa sufre mucho más. El objetivo no es sólo castigar a Rusia, sino también debilitar a Europa como competidor de EEUU.
COMENTARIO DEL REPRESENTANTE PERMANENTE DE LA FEDERACIÓN DE RUSIA, ALEXANDER LUKASHEVICH, EN LA CLAUSURA DE LA CONFERENCIA ANUAL DE REVISIÓN DE LA SEGURIDAD DE LA OSCE, VIENA, 29 DE JUNIO DE 2022
Sobre las relaciones con Europa
La situación en Ucrania es una consecuencia directa de la política de las élites occidentales, que han puesto su propia exclusividad y la prioridad de los intereses y consideraciones de conveniencia política por encima de la primacía del derecho internacional.
El prólogo de una nueva crisis aguda en la región euroatlántica fue la negativa a construir un diálogo sobre los principios de seguridad igualitaria e indivisible, consideración mutua de intereses y preocupaciones. La confrontación no es nuestra elección.
Rusia tradicionalmente prefiere resolver los problemas en la mesa de negociaciones.
Pero no nos escuchan, ignoran nuestras preocupaciones. Rusia ya no cree en quimeras sobre la construcción de una «casa única europea». Durante las últimas décadas, hemos podido ver lo que se esconde bajo su apariencia atractiva.
Conocemos también el precio de los principios elaborados por el “Occidente colectivo”, que se utilizan para “civilizar”, como algunos consideran, países de “segunda categoría” “al este de Viena”.
Algunos países, nos guste o no, seguirán siendo vecinos. Rusia espera que este sea un régimen, si no de buena vecindad, al menos de previsibilidad y desarrollo sostenible.
A su vez, esto dicta la necesidad de desarrollar reglas comunes para la convivencia libre de conflictos en aras de mantener la estabilidad regional y global.
Creemos que la OSCE tiene el potencial para poner en marcha ese proceso de reflexión, del que dependerá en gran medida el destino de nuestra Organización. Estamos abiertos a un diálogo equitativo y orientado a resultados prácticos.
Sobre lo ocurrido en Kremenchug
El 27 de junio, las Fuerzas Aereas Rusas llevaron a cabo un ataque de alta precisión sobre hangares con armas y municiones recibidas de los Estados Unidos y algunos países europeos.
El hangar estaba ubicado a unos 250 metros del centro comercial, en el área de la planta de maquinaria vial de Kremenchug.
Como resultado, las armas y municiones almacebadas allí para ser enviadas a los militares ucranianos en Donbass fueron eliminados. Al mismo tiempo, la detonación de municiones almacenadas provocó un incendio en un centro comercial cercano fuera de funcionamiento.
Una vez más, el edificio fue alcanzado por proyectiles de la OTAN, no por un ataque preciso ruso.
Donde las formaciones ucranianas equipan los almacenes de estas municiones es un tema aparte. De una forma u otra, las armas occidentales seguirán siendo rastreadas y destruidas.
El asesor del Ministro del Interior de Ucrania A. Gerashchenko logró visitar el edificio, que supuestamente fue destruido por un «golpe de misil ruso», e inmediatamente publicó un video desde allí: todos los productos en contenedores de vidrio estaban en los estantes intactos.
¿Podría todo esto haber sobrevivido al impacto de un misil? No hay embudo, el estacionamiento frente al edificio está vacío y los autos que están parados están intactos.
BOMBARDEO DE EJERCITOI UCRANIANO
El ejército ucraniano bombardeó Donetsk con lanzacohetes múltiple, disparando 20 proyectiles. Así lo anunció el viernes la oficina de representación de la República Popular de Donetsk en el Centro Conjunto para el Control y la Coordinación del Régimen de Alto el Fuego.
Según se indica, las fuerzas armadas de Ucrania dispararon cinco proyectiles contra la ciudad con artillería de 155 mm, que está en servicio de los países de la OTAN. Se conoce sobre cuatro heridos en Donetsk, así como cuatro heridos y un fallecido en Yasinovataya.
SOBRE LOS PRINCIPALES HECHOS HISTÓRICOS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL Y LA GRAN GUERRA PATRIA
Continuamos publicando sobre los principales hechos históricos de la Segunda Guerra Mundial y la Gran Guerra Patria.
La Conferencia de Teherán (el 28 de noviembre – el 1 de diciembre de 1943) constituyó el punto culminante de la cooperación en el seno de la Gran Alianza. Los éxitos del ejército soviético y la inminencia de la apertura de un segundo frente en Europa occidental permitieron que el primer encuentro entre Stalin, Churchill y Roosevelt se desarrollara en un ambiente de gran cordialidad.
Los principales dirigentes aliados eran conocidos como los «Tres Grandes» a causa del poderío de las naciones que representaban y su colaboración en aras de la paz durante la Segunda Guerra Mundial, sus decisiones cambiaron el curso de la historia.
El objetivo de la cumbre fue coordinar los planes de guerra de los aliados, en un momento en el que casi todo el peso de las operaciones contra las potencias del Eje recaía sobre la Unión Soviética.
Por esta razón, el principal tema de debate se centró en la apertura de un segundo frente bélico en Europa Occidental, para obligar a la Alemania nazi a dividir sus fuerzas. Antes de viajar a Teherán, Roosevelt y Churchill se reunieron en El Cairo, Egipto, con Chiang Kai-shek, líder de la República de China.
Si bien el objetivo de la conferencia consistía en acordar la posición de los aliados hacia Japón, Churchill quería aprovechar la oportunidad para convenir con Roosevelt una postura común frente a las que suponía que serían las demandas de Stalin. Sin embargo Roosevelt se mostró esquivo y no quiso debatir sobre ese tema.
En el momento en que se inició la Conferencia de Teherán, las fuerzas del Eje ocupaban gran parte de Europa, pero luego de la batalla de Kursk y de habían comenzado a retroceder de la Unión Soviética
Polonia sería desplazada hacia el oeste, cediendo a la Unión Soviética los territorios que esta había ocupado tras la firma del tratado de no agresión germano-soviético de agosto de 1939. Se la compensaría con territorios arrebatados a Alemania, ubicados al este del río Oder.
Los partisanos yugoslavos, liderados por el mariscal Josip Tito, debían recibir suministros y equipamiento militar y se los apoyaría mediante la organización de operaciones de comandos y bombardeos aéreos sobre posiciones alemanas.
Los aliados occidentales lanzarían la «Operación Overlord» (el desembarco de Normandía) en mayo de 1944 (lo que la URSS añoraba desde el año 1941), al mismo tiempo que se realizaría un ataque de distracción en el sur de Francia.
Paralelamente, la Unión Soviética desencadenaría una ofensiva en el frente oriental para evitar que Alemania pudiera trasladar tropas desde el este hacia el oeste.
Los Estados Mayores militares de las 3 grandes potencias aliadas deberían permanecer en estrecho contacto a partir de ese momento, para garantizar la efectividad de la apertura de un nuevo frente en Europa Occidental. Se presionaría a Turquía para que su gobierno le declarara la guerra a Alemania.
La Unión Soviética se comprometió a declararle la guerra a Bulgaria, si esta atacaba a Turquía, y a Japón, luego de que se hubiera consumado la derrota de Alemania.
Se iniciaron conversaciones para constituir una organización internacional que reemplazara a la Liga de las Naciones, desprestigiada por no haber podido impedir el comienzo de la Segunda Guerra Mundial.