BOLETÍN 15 DE JUNIO 2022
CONVERSACIÓN TELEFÓNICA ENTRE EL PRESIDENTE DE RUSIA, VLADÍMIR PUTIN, Y EL PRESIDENTE DE CHINA, XI JINPING, 15 DE JUNIO (EXTRACTOS)
Los líderes constataron que las relaciones ruso-chinas se encuentran a un alto nivel sin precedentes y están mejorando constantemente.
Reafirmaron el deseo de profundizar consecuentemente la asociación integral e interacción estratégica en todas las áreas.
Se acordó ampliar la cooperación en la esfera energética, financiera, industrial, de transporte y otras, teniendo en cuenta la situación de la economía global que se ha vuelto más complicada por la política ilegítima de sanciones de Occidente.
Se acordó ampliar la cooperación en la esfera energética, financiera, industrial, de transporte y otras, teniendo en cuenta la situación de la economía global que se ha vuelto más complicada por la política ilegítima de sanciones de Occidente.
Al discutir la situación en la palestra internacional, se enfatizó que Rusia y China, como antes, actúan desde una posición común o muy cercana, defienden consistentemente los principios fundamentales del derecho internacional y buscan construir un sistema internacional verdaderamente multipolar y justo.
Se confirmó la disposición mutua para estrechar la coordinación y el apoyo en varios formatos multilaterales, incluso en la plataforma de la ONU. Se enfatizó la importancia del trabajo conjunto en el marco de la Organización de Cooperación de Shanghai y el grupo BRICS, en particular, en el contexto de la próxima cumbre BRICS los días 23-24 de junio, organizada por la presidencia china en esta asociación.
Vladimir Putin presentó sus evaluaciones fundamentales de la situación en Ucrania y las tareas a resolver durante la operación militar especial.
El presidente de China destacó la legitimidad de las acciones de Rusia para proteger los intereses nacionales vitales frente a los desafíos a su seguridad creados por fuerzas externas.
VICECANCILLER DE RUSIA SERGEI RIABKOV: RUSIA PONDRÁ EL PUNTO FINAL A SU OPERACIÓN EN UCRANIA «DONDE LO ESTIME NECESARIO»
«Nuestra tarea es probar que esos planes
[lograr la derrota de Rusia]
fracasarán y que pondremos el punto final a la operación militar donde lo estime necesario Moscú, y no donde lo prefieran los estrategas, ideólogos y asesores en Washington y otras capitales».
Riabkov destacó que «debemos probar con nuestra fuerza de voluntad, con el poderío de nuestras armas y con toda nuestra determinación que vamos a defender hasta la muerte las posiciones de Rusia».
Señaló, asimismo, que los objetivos de la operación militar en Ucrania se alcanzarán sin importar cuánto armamento reciba Kiev de Estados Unidos y sus aliados. «No tenemos otro guion que el que prevé el logro completo de los objetivos que persigue la operación militar lanzada en Ucrania por las fuerzas aliadas de Rusia y las repúblicas de Donbás…
Estos objetivos se lograrán sin que importe cuántos sistemas [de armamento] envíen a Kiev los norteamericanos y sus seguidores», apuntó el vicecanciller ruso. Además, Riabkov achacó al Gobierno ucraniano y a sus «titiriteros» de Occidente la responsabilidad por la suspensión de las negociaciones de paz.
«En ellos recae la responsabilidad completa por la falta de paz que no llega todavía a la tierra de Donbás, a la tierra de Ucrania, por el atascamiento de las negociaciones que no avanzan desde mediados de abril, cuando la delegación ucraniana, azuzada por sus titiriteros occidentales, abandonó el proceso de diálogo», dijo.
La política de Occidente y de Ucrania, agregó, está orientada a frustrar una solución pacífica. Si bien llamó a no renunciar a la diplomacia y al diálogo político, el viceministro recalcó que los objetivos de la operación especial de Rusia han sido definidos con claridad.
«El que [el presidente de Ucrania, Volodímir] Zelenski y su equipo no estén preparados para las conversaciones, y los que están detrás de él sigan con su locura de inundar de armas a Ucrania, es su propia elección. Por trágico que sea no podemos retroceder», apostilló.
LA PORTAVOZ DE LA CANCILLERÍA DE RUSIA MARÍA ZAJÁROVA: LA UE DEBE CESAR EL ENVÍO DE ARMAS A KIEV O RECONOCER LAS REPÚBLICAS DE DONETSK Y LUGANSK
Suministro de armas a Ucrania Posibilidad de un conflicto nuclear
«Tenemos una actitud negativa respecto a los suministros de armas pesadas, incluido el armamento de gran alcance(…) Esto fue y será un elemento indispensable de nuestra postura oficial.
La transmitimos a los estadounidenses constantemente vía protestas, notas, advertencias de las consecuencias», sostuvo. «EEUU sigue jugando con fuego, es peligroso. Ahora es momento de máxima cautela por parte de Occidente, de abstenerse de escalar la situación, así como dejar de abastecer el régimen de Kiev con armamento».
Recordó que Moscú ha declarado reiteradamente que las armas de Occidente suministradas a Ucrania son objetivos legales para sus Fuerzas Armadas. Además, el viceministro de Exteriores declaró que Moscú espera que Washington y Occidente en general tengan suficiente sentido común para no permitir que la situación en Ucrania provoque un choque directo con el uso de armas nucleares.
«Espero que, después de todo, los restos del sentido común permitan a esos políticos, esos aspirantes al papel de directores mundiales, abstenerse de tomar ese tipo de decisiones, porque, en el caso del uso de armas nucleares, ya no se podrá dar marcha atrás», dijo el diplomático.
Según el representante de la Cancillería rusa, Moscú rechaza la posibilidad de una guerra nuclear limitada, «tan común para los estadounidenses y para quienes planean sus conflictos bélicos». «Están tratando de acusarnos de que supuestamente estamos llevando a cabo una especie de ‘juego’ retórico sobre el tema del uso hipotético de armas nucleares.
Eso es completamente falso. Se trata de argumentos sin valor, pero estamos acostumbrados al hecho de que Occidente ya no presenta más que tergiversaciones y falsificaciones», indicó el viceministro.
Riabkov sugirió que, al referirse a la necesidad de una «derrota estratégica de Rusia» en Ucrania, Occidente espera que Moscú reconozca el supuesto «carácter fallido de su curso de política exterior, y no solo en Ucrania».
«Es una paranoia antirrusa que se apoderó de las mentes de quienes, por sus obligaciones laborales y por el nivel de sus puestos, deberían abordar de manera más responsable las relaciones internacionales», resumió.
Después de la desaparición del Pacto de Varsovia y de la URSS, en Europa se quedaron grandes reservas de armamento soviético. Cuando los exmiembros del pacto se unieron a la OTAN, las armas pasaron a disposición de ese bloque, y ahora se envían a Ucrania.
Al mismo tiempo, las exportaciones bélicas por parte de la UE desde 2008 están reguladas por reglas muy claras. En particular, según esos documentos, «los Estados miembros deben denegar la licencia de exportación si existe un claro riesgo de que la tecnología o el equipamiento militar exportado puedan utilizarse para la represión interna».
Según esos actos de la UE, «los Estados miembros deben denegar una licencia de exportación de tecnología o equipo militar que pueda provocar o prolongar conflictos armados o exacerbar las tensiones o conflictos existentes en el país de destino final».
«Los países de la UE, en principio, no deben suministrar armas, incluidas las soviéticas, a un estado que las utilizará o tenga la intención de usarlas contra sus propios ciudadanos en un conflicto interno. Está claro por qué se hizo eso: para evitar que se agraven las guerras civiles en los países importadores de armas».
La UE no reconoce el cambio en las fronteras territoriales de Ucrania, es decir, contrariamente a las realidades políticas y administrativas existentes, considera los territorios de la RPD y la RPL como ucranianos. De seguir suministrando armas, Bruselas o reconoce las RPD y RPL, y el conflicto dejará de ser un conflicto interno de Ucrania, o los países miembros de la UE están violando sus principios fundamentales. Obviamente, al decidir el suministro de armas a gran prisa, los estrategas europeos no pensaron en el hecho de que en realidad se metieron en un callejón sin salida, pues no les queda más remedio que dejar de suministrar armas, retirar todo lo enviado, o reconocer las RPD y RPL».
La portavoz de la Cancillería de Rusia María Zajárova sobre la Cumbre de las Américas
Uno de los objetivos que persiguió la Cumbre de las Américas fue reducir al mínimo la cooperación de Latinoamérica con Moscú y Pekín, declaró la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova.
«Tras el guion trazado de reafirmar la influencia exclusiva de Estados Unidos en esta región del mundo, traslucía uno de los objetivos clave, el de minimizar la cooperación con Moscú y Pekín.
Cuanto Washington presenta como agenda unificadora tiene por base el propósito de destruir los vínculos naturales de diversas regiones y agrupaciones con Moscú y Pekín”.
Según la diplomática, a los representantes de América Latina les inculcaron la idea de que Moscú está desestabilizando los mercados energético y de alimentos. Lo decían a pesar de que Rusia estuvo desarrollando durante decenios la cooperación energética con todas las regiones del mundo sobre la base del beneficio recíproco y las leyes vigentes.
Washington presionó a los países y compañías haciéndolos renunciar a la cooperación bajo la amenaza de sanciones, persiguiendo el objetivo de reemplazar a Rusia como suministrador de agentes energéticos.
«Los Estados de América Latina y del Caribe aspiran a cooperar en pie de igualdad, rechazan los intentos de tratarles como a subordinados o un instrumento.
Al diferir en los matices de la evaluación de la actual situación internacional y afrontar problemas (…), ellos muestran una notable autonomía política y la preparación para promover sus intereses, aspiran a que su voz -plural y unida a la vez- se oiga en la palestra internacional”.
HOY ARRANCO EL FORO ECONOMICO INTERNACIONAL DE SAN PERTESBURGO (SPIEF) EL TEMAS PRINCIPAL DEL EVENTO ESEN EL MUNDO NUEVO, NUEVAS PERSPECTIVAS”
En el transcurso del Foro se debatirán los asuntos actuales de la economía global, integración regional, desarrollo de nuevas industrias y tecnologías, así como los retos globales a los que se enfrentan Rusia y otros países del mundo.
El 17 de junio, el Presidente ruso, Vladímir Putin, participará en la sesión plenaria del SPIEF.
A la reunión también asistirá el mandatario de Kazajistán. Los líderes de China y Egipto pronunciarán sus discursos por videoconferencia.
El Canciller ruso, Serguéi Lavrov, también tomará parte en el Foro. Tiene previsto mantener negociaciones con los socios internacionales, entre ellos el Viceprimer ministro cubano, Ricardo Cabrisas, Vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, y el Representante Especial del Presidente de Nicaragua para las Relaciones con Rusia, Laureano Ortega.