Por Sergio Nolasco.
La Caridad es humillante,
porque se ejerce verticalmente desde arriba,
la Solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo.
Eduardo Galeano.
Ayer transitaba por el centro, mientras escuchaba el mensaje presidencial con las nuevas restricciones, las calles estaban desoladas con apenas algunos peatones y muy pocos vehículos, sin embargo las imágenes del centro de lima se contrastaban con lo que se veía en TV por la mañana, los mercados de caquetá y Condenilla por citar algunos se veían abarrotados de gente pero sobre todo de ambulantes que eran reprimidos por el serenazgo y la policía, en todos los canales se podía ver lo mismo, los conductores televisivos se ufanaban por criticar el poco civismo de los ambulantes que no entendían y hacían caso omiso de las disposiciones del gobierno, pero los ambulantes se resistían a ser desalojados apelaban a su derecho al trabajo, una de ellas declaro que ellos vivían del trabajo diario, que no les dieron el bono de 380 soles asignados por el gobierno y tendrían que escoger entre morir de hambre en sus casas o morir de corinavirus en las calles y al final manifestó yo no quiero morir de hambre junto con mi familia, entonces surgen las primeras interrogantes, ¿la TV esta creando una corriente de opinión para justificar las restricciones y la represión?, ¿Por qué esta gente pobre no tiene derecho a trabajar, en un rubro que supuestamente esta permitido alimentos?, ¿si el serenazgo la policía y el ejercito están en las calles durante el toque de queda, no era mas fácil y menos traumático resguardar estos mercados antes que los comerciantes salgan, o al menos tratar de regular o controlar la venta sin aglomeraciones?.
Entonces constatamos la valides de nuestros ideales, las crisis sociales y naturales nos muestran con mayor claridad el carácter clasista del sistema capitalista de producción, durante las crisis los monopolios industriales y financieros globales elevan sus márgenes de ganancia y descargan el peso de la crisis sobre los mas pobres, ante una infraestructura de salud deficiente incapaz de atenderla pandemia, temen a la protesta ciudadana y como se dice popularmente ponen el parche antes que la herida, y no serán los sistemas de salud o los ministerios, ni los médicos ni las enfermeras etc, los que nos libraran del virus, si no las políticas de control social las restricciones dictadas por el gobierno, a costa de sacrificar al pueblo, de la inmovilidad de los trabajadores, la paralización de la pequeña y mediana empresa, y al final de la escala están los mas pobres ambulantes, moto taxistas, recicladores, indigentes en fin los peruanos en los que no se piensa cuando se diseñan las políticas económicas.
Por si fuera poco el gobierno se resiste a dictar las medidas complementarias que alivien un poco la economía popular, como la condonación de los pagos de servicios básicos, energía eléctrica, agua, teléfono, internet, cable etc. durante los meses que dura la crisis sanitaria. Además del pago de alquileres de viviendas, suspensión del pago de arbitrios municipales, impuesto predial etc. Congelamiento de los intereses bancarios y el prorrateo de la deuda, por citar algunas medidas.
Nos dicen también que es una pandemia mundial, que hemos reaccionado antes que otros países y que el gobierno de Vizcarra esta afrontando acertadamente la crisis sanitaria”, pero nos ocultan que la pandemia del Covid-19 confirma las graves deficiencias de los sistemas de salud pública en la mayoría de países de nuestra America, esas irregularidades son el resultado de políticas económicas usadas por los gobiernos serviles a las transnacionales para mercantilizar y privatizar la salud publica, beneficiando a los grupos de poder económico y a los monopolios farmacéuticos.
Además el gobierno se niega o peor aun teme la represalia de EE. UU. si acepta la cooperación solidaria de Cuba, como ya lo hicieron China e Italia, temen a la ingerencia cubana en un asunto de salud publica y sin embargo suscribe un vergonzoso pronunciamiento del grupo de Lima justificando el despliegue militar norteamericano para realizar maniobras provocadoras centra Venezuela. Un grupo de mandatarios repudiados y que no representan a sus respectivos pueblos como Bolsonaro, Duque, Piñera y G. Añes se irrogan la representatividad de toda nuestra América respaldado la postura demencial y belicista de Donald Trump, ese es el camino que seguirá Vizcarra en su política internacional, sumarse a quienes asedian a Venezuela en medio de una pandemia mundial, interfiriendo en asuntos internos de una nación soberana.
A nivel internacional esta crisis nos demuestra quien es quien, demuestra que la solidaridad europea y norteamericana no existe, sin embargo emerge grandiosa la solidaridad cubana con todos los pueblos, sin ningún tipo de revanchismo contra aquellos que siempre directa o indirectamente apoyaron el criminal bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba, cuando las grades potencias y el imperialismo norteamericano no hicieron nada por remediar la crisis sanitaria, los médicos cubanos empezaron a llegar a diversos lugares del mundo, a apoyar sin pedir nada a cambio, leales al legado de Fidel.
Las muestras de solidaridad de los cubanos están siendo replicadas por los gobiernos de China y de Rusia quien particularmente a pesar de ser el país más extenso y poblado de Europa fue quien mejor controlo la crisis sanitaria lo cual es ocultado por la prensa mundial al servicio del gran capital. Por ultimo existe una nación que vive en cuarentena durante muchos años, cercada, bloqueada y hacinada, confinada a la franja de Gasa sin el más mínimo respeto a sus derechos humanos, con políticas de restricción y control impuestas por el sionismo internacional desde el estado de Israel, si a nosotros nos cuesta ahora sobrellevar esta cuarentena, imaginen lo que sufre este pueblo, me refiero a Palestina, quienes a pesar de las duras condiciones resiste, lucha y con nuestra solidaridad ¡Vencerá!.
Lima, 3 de Abril del 2020.
La especie humana alcanzara su grado más alto de conciencia
cuando cada pueblo sea capas sufrir como propio
el dolor de los demás pueblos del mundo.
Fidel Castro, 8 de Set. del 2000